Director: Ed Harris
Título Original: Appaloosa
Idioma en que se proyecta: V.O. con subtítulos.
País: USA
Año: 2008
Duración: 115´
Reparto: Ed Harris, Viggo Mortensen, Renée Zellweger, Jeremy Irons, Ariadna Gil
Elegida por: Notoriamente Nefasto
Sinopsis: En la ciudad de Appaloosa, necesitan la ayuda de alguien que les libre del malo y su banda. Acudiendo a esa llamada, llegan dos tipos. Pero qué dos tipos.
Al poco, del tren se baja una mujer con una sola maleta, un sólo vestido, y un sólo dolar.
Mi regalo con lazo para esta Navidad, es esta película, que
se encuentra en el top de mi lista particular de pelis que me gustan la hostia.
En la misma senda emprendida por "Sin Perdón" en
la actualización del western, se encuentra "Apaloosa". No es tan
conocida ni tiene tantos fans, y no sé si es tan buena o no, pero a mí me
encanta. Será porque sale Viggo Mortenssen, uno de mis actores favoritos como
sabéis, será porque es del Oeste, será por lo que sea, pero es una de esas
pelis que cada vez que las ves, las disfrutas, y además le encuentras cosas
nuevas.
Es un western moderno, como digo. Para mí, eso consiste en
que las situaciones y los actores son más realistas que lo que se hacía en los
clásicos de los 40,50 y 60. Los personajes tienen más pliegues, y las
relaciones entre ellos son más complicadas, como suele pasar en la vida real. Y
si, por lo que sea, tienes que enfrentarte a tiros a cuatro tipos, por muy
rápido que seas con el revólver, lo más probable es que palmes. Vamos, que no eres
John Wayne, que disparas acertando a todo lo que se mueve, mientras que los que
te disparan no sabemos qué les pasa que no aciertan nunca.
La historia no es mucho más complicada que la de un western
al uso, eso tengo que reconocerlo. Dos tipos que se buscan la vida a tiros,
generalmente en el lado bueno de la ley, llegan a un pueblo que quiere
contratarlos para defenderse de la banda del malo que les tiene acojonados. Lo
que pasa es que el malo es Jeremy Irons, que, siendo un malote bastante de libro,
tiene mucho estilo, y puede hasta llevarse a la chica si se lo propone. Porque
la chica es de esas de verdad, que no va como pollo sin cabeza enamorada del
héroe, sino que tiene sus cosillas, porque una tiene que vivir de algo, oiga.
Virgil Cole (Ed Harris, ahí queda eso), es un tipo que,
siendo bueno en su trabajo, a veces no encuentra la palabra correcta, y en
cuanto a mujeres puede que tenga que aprender cosas. O no, porque igual sabe
tanto de mujeres y de la vida, que no le importa hacerse el tonto. De cortinas
entiende poco, pero eso sí, de cómo resolver situaciones a tiros, sabe un
huevo.
Su amigo Everett Hitch (Viggo para los amigos) que puede que
sepa algo más de mujeres, de cortinas anda parecido que Virgil, pero de manejar
su escopetón, tanto disparándolo como para intimidar sin tener que tirar del
gatillo, controla que da gusto.
Todos estos ingredientes, se aderezan con temas clásicos en
el western de toda la vida, como son el honor, el sentido del deber, o la
amistad. No faltan ni los indios ni un tren, por no faltar. Y el resultado es
una película que parece un western sin más, pero que si te fijas, tiene una carga
de profundidad en cuanto a las pequeñas o grandes historias que se tejen entre
sus personajes, además de las escenas de acción que tanto nos suelen gustar.
Escenas en las que fijarse, tanto de acción como de las
otras, si uno quiere disfrutar Apaloosa:
Uno: Everett apoyado en el quicio de la puerta, con las
piernas cruzadas, taza de café en mano, media sonrisa en la boca, y partiéndose
el culo de su amigo Virgil porque lo que no consigue perturbar una bala que
pasa a tu lado, lo consigue un comentario malicioso de una mujer.
Dos: Virgil, Everett y Allison, juntos pasando noche al
raso, y cuando Allison acusa a Virgil de haber intentado besarla, Virgil con
una sola mirada a su amigo sabe que de eso nada, monada.
Tres: Vamos los dos andando hacia donde hemos quedado a
pegarnos tiros con dos, y encima vemos que no son dos, que son cuatro, y
apretamos el paso mientras te digo a por quién vas tú y a por quién voy yo, y
luego los tiros.
Cuatro: Virgil en su duelo particular, retando al malo, y
esperándole luego para el duelo más clásico del mundo en medio de la calle del
pueblo, pero de una manera que nunca has visto.
Cinco: el héroe se va con su caballo, con el sol del
atardecer.
Joder, te he dado ya cinco escenas memorables con las que
disfrutar. Eso ya es una película memorable entera.