Director: Billy Wilder
Título Original: One, Two, Three
Idioma en que se proyecta: Castellano
País: USA
Año: 1961
Duración: 108'
Reparto: James Cagney, Pamela Tiffin, Horst Buchhold
Premios: Muchas nominaciones a los Oscar, Globos de Oro...
Elegida por: Sr Marrón
Sinopsis: Época de la Guerra Fría. C.R. MacNamara, representante de una multinacional de refrescos en Berlín Occidental, hace tiempo que proyecta introducir su marca en la URSS. Sin embargo, en contra de sus deseos, lo que su jefe le encarga es cuidar de su hija Scarlett, que está a punto de llegar a Berlín. Se trata de una díscola y alocada joven de dieciocho años, que ya ha estado prometida cuatro veces. Pero lo peor es que, eludiendo la vigilancia de MacNamara, la chica se enamora de Otto Piffl, un joven comunista que vive en la Alemania Oriental. (FILMAFFINITY)
Llevaba mucho tiempo, mucho, deseando pone esta película, que como tantas otras vi de crío, me dejó muy buen recuerdo, y nunca más volví a ver hasta ahora.
La verdad es que sólo recordaba que era muy rápida y disparatada, que salía James Cagney (actor que me gusta mucho haciendo de malo y que volverá sin duda al cineclub haciendo el hampón, que es lo que mejor sabe hacer) nervioso perdido toda la peli, y que no paraba de repetir instrucciones precedidas de Uno, Dos, Tres...
Me gustó volver a verla y me trajo buenos recuerdos, de cine en familia, risas y buen rollo casero. De lo que no tenía ni idea es que era de Billy Wilder, por lo que este gran director ha entrado al Cineclub sin proponérselo y con una película bastante desconocida.
Las interpretaciones son muy buenas, en especial la de Cagney, protagonista absoluto que borda el papel y en ningún momento desfallece, la chica y el asistente personal de pasado dudoso y taconeo permanente también son geniales. El novio de la chica sobreactúa un poquito, y he leído que intentó (sin conseguirlo) todo el rodaje "comerse" a Cagney. Por cierto, este chico sale también en Los Siete Magníficos y en La Vida es Bella, ya me sonaba a mi su cara...
La música es genial, no hay nadie que no conozca su melodía principal, aquí un ejemplo
El argumento me parece muy original, ambientado en plena guerra fría. De hecho se rodó una parte en alemania y Billy Wilder tuvo que terminarla en otro país porque de la noche a la mañana le levantaron el muro de Berlín y le fastidiaron el rodaje. Y es literal lo de "de la noche a la mañana". En la noche del 13 de Agosto de 1961 se instalaron más de 150 km de alambrada separando las dos alemanias. Lo qué se aprende con el Cineclub!
Yo me lo pasé muy bien y me alegra que por lo menos ninguno de mis compañeros hubiera oído hablar de esta película. Espero que os gustara.
Una de las cosas que más me sorprende y anima a la vez, es darme cuenta de que hay muchísimas películas antiguas que no conozco, y que están muy bien. A veces nos puede dar la sensación que ya hemos visto todas las películas que merece la pena ver, pero es sólo pura ignorancia, porque siempre hay alguien que te descubre nuevas pelis, y eso, como decía el otro, es un pensamiento alentador.
ResponderEliminarYo tengo que pedir perdón primero porque lo cierto es que llegué a la sesión en estado de agotamiento puro, y mi lucha contra el sueño me impidió disfrutar de la peli todo lo que merecía. Aún así, me lo pasé muy bien, y siempre es una gozada descubrir una nueva película.
No había visto nunca a James Cagney haciendo comedia, y la verdad es que el tío es un crack. De Billy Wilder, comprobé que es cierto lo que siempre decía, y esto es que una peli tiene que ser "ritmo, ritmo, ritmo y ritmo". La verdad es que la cinta no te da ni un segundo de respiro, y tiene un ritmo endiablado. Incluso diría que echo de menos algún momento más flojo para respirar, y que no es posible mantener el tono frenético continuamente. A veces creo que la pausa te hace apreciar más el momento siguiente.
Aún así tiene muchos gags y diálogos muy divertidos, y me lo pasé muy bien viéndola.
Evidentemente esta es una película que no había visto hasta esta sesión de cineclub. Cuando nos la presentó y nos dijo que era en blanco y negro me asusté un poco. No porque no haya grandes películas en blanco y negro, sino porque creo que me dicen más las de color.
ResponderEliminarEl caso es que una vez que empezamos James Cagney cogió velocidad a ritmo de "la danza del sable"y así estuvo toda la película, sin parar ni un minuto. El ritmo es frenético. Lo cual a mí me gustó. Odio las pelis lentas y esta es todo lo contrario.
Por otro lado me parece que el fondo de la idea es muy buenista. entiendo que estamos a principios de los 60, en plena guerra fría y que el cine, en muchos casos ( y a lo mejor es por lo que me cuestan un poco más las pelis en blanco y negro), tiene una finalidad y una moralina. En este caso es "Qué buenos somos nosotros y que malos y tontos son los comunistas".
Me lo pasé muy bien y me pareció divertida, con algunos diálogos de humor inteligente muy buenos.
Un gran descubrimiento gracias al cineclub