Director: David Lynch
Título Original: Wild at Heart
Idioma en que se proyecta: Castellano
País: USA
Año: 1990
Duración: 125´
Reparto: Nicolas Cage (sí! el inefable Nicolas Cage!), Laura Dern, Willem Dafoe, Isabella Rosellini
Música: Angelo Badalamenti
Premios: Palma de Oro en Cannes
Elegida por: Notoriamente Nefasto
Sinopsis: Lula recoge en la puerta de la cárcel en su descapotable a Sailor, que sale de permiso tras haber sido encerrado por golpear violentamente al que había sido enviado por su suegra para separarle, precisamente de su novia Lula.
La escucha de un especial de Todopoderosos, unido al reciente y aplaudido estreno de la nueva temporada de Twin Peaks, fueron los detonantes de mi decisión de traer de vuelta al Cineclub a David Lynch. Sabía que era una decisión arriesgada y controvertida, pero qué dos mejores adjetivos que estos precisamente nos pueden servir para definir a David...
Es la única película en la que Nicolas Cage está bien, y sólo por eso ya es motivo más que suficiente para verla. A partir de aquí, sí, bueno, ganó un Oscar por "Leaving Las Vegas" y tal, pero desde luego nos ha ido dejando perla tras perla, a la par que pelucas cada vez más arriesgadas y divertidas.
A mí, Corazón Salvaje, me gustó en su día, me gustó mucho, si bien no la había vuelto a ver desde hace 20 años. Por ello, realmente me picaba mucho la curiosidad comprobar si la película resistía en ni corazón el paso del tiempo.
No sólo eso, sino que creo que David Lynch se ha ganado por mérito propio un hueco en la historia del cine moderno, y merece como tal aparecer en nuestro Cineclub, a la par que nos sirve para aprender más y más de cine cada día.
La película me sigue gustando, pero ciertamente ha cambiado respecto a cómo la recordaba. Porque desde entonces uno ha visto muchas pelis, pero no por otra cosa. Las influencias en el cine actual me parecieron más que obvias, y algunas las descubrí yo sólito, y otras me las descubrieron los sabios tipos del podcast de Todopoderosos (que desde aquí recomiendo encarecidamente!). Vi claramente a Tarantino detrás de la historia de Lula y Sailor, por ejemplo. La violencia de algunas imágenes, que me atraparon cuando la vi por primera vez, aunque ahora parezcan ya más que normalitas, son predecesoras de las que luego nos regala Quentin, claramente. Y la historia, es muy parecida a la que nos contaba el guión de Tarantino en "Amor a Quemarropa", una de mis pelis favoritas.
En realidad es una romántica historia de amor, valga la redundancia, porque nos cuenta el amor incomprendido de un hombre y una mujer que se quieren de manera absolutamente incondicional y contra todo lo que les venga encima. Son dos héroes puros además, en el sentido de que visten como les place, actúan como les da la gana, disfrutan del sexo sin miramientos, y bailan en público como se debe bailar, es decir, como si nadie te mirase y estuvieses sólo. David Lynch nos los presenta así, aunque luego, eso sí, es único creando poco a poco alrededor la opresión del mundo vulgar y triste que a todos nos rodea, y que al final todo lo jode e impregna.
Pero en este caso Lynch incluso nos regala un final épico y maravilloso, con Nicolas Cage con pelazo al viento cantando el "Love me tender"! Qué más quieres, por Dios!