Título: The Fly
Director: David Cronemberg
Título Original: La Mosca
Idioma en que se proyecta: V.O. Subtitulada
País: USA
Año: 1985
Duración: 100 minutos
Reparto: Jeff Goldblum, Geena Davis, John Getz
Premios: Osca a mejor maquillaje
Elegida por: Sr. Marrón, obviamente
Si me pongo a pensar en la pelicula que más asco me ha dado en la vida (asco en el sentido de repulsión, de ganas de quitar la vista de la pantalla), la película que más miedo me ha dado, la película en la que he tenido menos envidia a su protagonista, la primera que me viene a la cabeza es La mosca de Cronemberg.
Con mis 12 o 13 añitos que tenía cuando se estrenó, me fuí a verla sólo y sin que mis santos padres se enteraran, a los cines Príncipe de Viana. No me imagino ni de lejos a mi hijo que ahora tiene esa misma edad yendo sólo al cine, y menos a esa película. Realmente han cambiado mucho los tiempos
Y en el cine, esos tiernos ojitos infantiles alucinaron, claro.Ya había visto el clásico de mismo nombre de los años 50, y aunque también en esa es horrible lo que le pasa al pobre científico de turno, en esa por lo menos se va haciendo pequeñito y, oye, quieras que no, un problema que se hace pequeño siempre es más fácil de llevar... pero es que en esta mira que es grande y feo el monstruo. Y asqueroso. Porque asqueroso es un rato el señor mosca. Da más asco que un bocata de pelos. Entre su museo de uñas, orejas y dientes en el baño, su piel bulbosa y grasienta, y su forma de comer dónuts (y otras cosas), el tío se lleva la palma.
Pero al margen de todo eso, lo que recuerdo que me daba más terror, era ver (Spoiler) cuando el monstruo quiere fusionarse con la chica y el bebé que lleva dentro. No sé. Me afectó mucho a mi eso. Me daba mucha pena la pobre chavala.
Es sin duda mi película favorita de David Cronemberg, que es tan raro y retorcido que casi siempre me perturba tanto que no disfruto con sus pelis, y además creo que es de las mejores de terror de los 80 (y, porqué no, de la historia del cine)
Espero que os asqueara y gustara tanto como a mi, y si no, al menos ya sabéis una nueva forma de comer, perfecta para cuando vas los domingos a casa de los suegros.
