33. Gigante

Título: Gigante
Título original: Giant
Idioma en que se proyecta: Castellano
Director: George Stevens
Pais: U.S.A.
Año: 1956
Duración: Unos increibles 204 minutos
Reparto: Elizabeth Taylor- (Leslie Benedict)
Rock Hudson - (Jordan "Bick" Benedict Jr.)
James Dean - (Jett Rink al principio, J.R. al final)
Chill Wills - (Tío Bawley, cada frase suya en la peli, una lección de sentido común. Me encanta este tío)
Un jovencísimo Dennis Hopper - (Jordan Benedict III)
Premios: Oscar en el 57 al mejor director

Elegida por: Javi A.

Fecha de proyección: doble sesión en días 1 y 8 de Junio de 2011

Desde los inicios del cineclub, tenía muchísimas ganas de poneros esta peli, pero su larga duración hacía que nunca viera el momento preciso (el miedo a los ronquidos, quiero decir...). Así que, para que no me os cansáseis, os propuse verla en dos veces.
La peli entra dentro de la categoría de "pelis que si nos has visto ya estás viéndola o te caneo por patán". Yo reconozco que era un patán, porque no recordaba más que escenas sueltas de haberlas visto de chiquitín (James Dean empapado de petróleo, sobre todo), pero no la había visto hasta que me la descubrió el libro de "Cineclub" de David Gilmour. En el libro aparece por supuesto la peli, y sobre todo hace incidencia en la importancia de un buen actor en una película o en una escena, más especialmente sobre la figura del mítico James Dean.

En mi defensa tengo que decir que con cada nuevo visionado de la peli, más entra ésta dentro de mi exclusivo círculo de pelis que me parecen acojonantes.

La peli, como bien me anticipaba el libro, se basa sobre todo en unos magníficos actores, en un triángulo perfecto formado por James Dean, Rock Hudson y Liz Taylor. Sobre la base de los memorables personajes que ellos componen, añadimos una peli de las de antes, con muchos extras, vacas y caballos, paisajes inmensos, mucho oficio del director y guionistas y ningún miedo a contar cosas a lo bestia. Como hacían las cosas antes.

Y, para mi gusto, lo más grande (o gigante de la peli), es que enmarcado en toda esa grandiosidad (valgan las redundancias), nos cuentan una historia que no es sino el devenir de una familia. Los problemas del día a día a los que todos nos enfrentamos, que no son sino la búsqueda del amor, la relación con tu pareja, con los tuyos, con tus hijos pequeños, con tus hijos que se harán mayores, los amores no correspondidos, la envidia, el orgullo, etc, etc, etc,. La peli permanece maravillosamente actual a pesar de que tenga la friolera de 55 años porque lo que les pasa a todos esos personajes sigue siéndonos totalmente cercano.

Contiene además escenas memorables, como, por supuesto, James Dean bajo el negro del petróleo, las peleas entre Rock y Dean, los geniales Rock y Liz leyendo en la cama y diciéndose "nos hemos hecho viejos, y lo peor es que ha sido de repente", o Rock Hudson cubierto de ensalada tras darse de ostias con el camarero racista. Para fijarse y flipar, ver cómo Dean juega con la cuerdecita mientras le ofrecen un dineral por su terrenito recién heredado, y cómo cuando sale de la habitación hace con la mano como si recogiera nieve de una mesa. Como cuenta David Gilmour en su libro, "es uno de esos momentos cinematográficos tan raros,tan inesperados, que la primera vez que lo ves no puedes dar crédito a tus ojos". Decía alguien que una buena peli son dos o tres grandes escenas, y ninguna escena mala. Bajo esa definición, la peli es no sólo buena, sino mejor.

Uno de los muchos mensajes que subyacen en la peli, para mí, es que lo que realmente nos afecta e importa en esta vida, la diferencia entre ser razonablemente feliz o no serlo, no está desde luego en el dinero o el lujo sino en la manera en cómo nos relacionamos con nuestros semejantes. La vida de una millonaria familia tejana de los años 30 no es tan diferente de la tuya propia.

Eso sí, como admirablemente contesta James Dean a los hermosos ojos violetas, "el dinero no es lo más importante en esta vida, sobre todo para aquellos que ya lo tienen".